El proyecto inició con unos planos aprobados por municipio que no agradecían al cliente y no cuadraban con su plan de negocio para el objeto. En casi 900m2 reorganizamos los interiores de 6 apartamentos, su paredes y divisiones, sus cielos, iluminación, acabados y conexiones de electricidad y plomería. Para el exterior creamos un esquema de colores para la fachada para todo el edificio.
El exterior protegido por las leyes de conservación del patrimonio se llevó al interior a través de extensos trabajaos de madera teca local para pisos, closets, sobres y otras áreas con pisos de pasta y mármol carrara. Estos elementos los contrastamos con un elevador moderno y unos apartamentos de cortes contemporáneos con amplios espacios abiertos de cocinas, comedores y salas y unos baños fluidos sin quicios y divisiones fijas.
